Mientras el O2
repone fuerzas en puerto, el invierno lo aprovechamos para
diseñar la ruta de la próxima etapa que comenzará la próxima
primavera y que nos llevara desde las aguas malagueñas hasta la isla
de Sicilia.
El invierno, es también tiempo de
trabajo. La anterior etapa me enseño lo difícil y duro que es
pintar en el barco, preparar las exposiciones mientras todo se está
moviendo y dentro del pequeño habitáculo del barco. Este es momento
de crear y preparar la obra que exhibiré en las próximas
exposiciones, en galerías peninsulares, baleares, sardas y
sicilianas.